Los derechos civiles
y políticos versus la violencia y la inseguridad social
En los países donde los derechos civiles y politicos de
los ciudadanos no son claramente
expresados y respetados por la ley, se convierten en sociedades represivas, violentas socialmente, inseguras,plagadas
de corrupción y,permeadas por un falso sentido moral que resulta ser en extremo
volátil y oportunista.
La
ausencia de los derechos civiles y politicos producen en la sociedad una
profunda vulnerabilidad social y una
falta total de viabilidad para la solución de las necesidades humanas.
La carencia de estos derechos, determina que la sociedad quede completamente a
merced de los que detentan el poder, y por tanto, es dominada
y controlada totalmente por la simple voluntad
de quiénes dirijen y manejan las instituciones de la sociedad.
Los
derechos
civiles y políticos, también llamados derechos cívicos, son
los derechos que determinan y protegen las libertades individuales de las personas que
habitan un país, así como de su supresión injustificada por parte
del gobierno o el de cualquier
autoridad política o autoridad pública o privada. Estos derechos garantizan la capacidad
del ciudadano para participar libremente en la vida civil y política de su país en condiciones de
equidad, de igualdad y sin ningún tipo de discriminación coacción o violencia.
El
respeto a los derechos civiles, en las sociedades en las que son plenamente
reconocidos, se establecen y se les
reconoce, por ley, a todos los ciudadanos. Los derechos civiles aunque forman
parte de los Derechos Humanos, son
vistos por el Derecho Internacional como la primera generación de los Derechos
Humanos.
Para
los tratadistas, los derechos humanos, son considerados derechos inherentes a
la condición de ser persona, es decir, un ser humano, por ejemplo, el derecho a la vida, el derecho a la libertad, el derecho a la
propiedad. La filosofía del Derecho plantea
que Los Derechos Humanos nacen con el hombre,
mientras que los derechos civiles y políticos
son parte del Contrato Social que
se establece dentro de una sociedad a
través de los derechos y deberes del ciudadano que deben estar claramente expresados en la
Constitución del Estado.
Para
la mayoría de los filósofos jurídicos, sociólogos, antropólogos, filósofos
morales, pensadores humanistas y etnólogos, los Derechos Humanos inherentes a
cada persona al nacer, deben constituir parte de los derechos civiles y
políticos y ser protegidos por el Estado como derechos constitucionales de las
personas que habitan en el país.
.
Los
derechos civiles y políticos encabezan la Declaración Universal de
Derechos Humanos de 1948 aprobada por las Naciones Unidas, lo que
los convirtió desde ese entonces, luego de la devastadora Segunda Guerra
Mundial, en parte sustancial del Derecho Internacional y en una aspiración legítima de todos los pueblos
del planeta Tierra.
Según la teoría de las tres generaciones de
derechos humanos. Los derechos de segunda generación, son los derechos
económicos , sociales y culturales y los de tercera generación son los derechos
colectivos de los pueblos, como el derecho de libre determinación de todos los
pueblos.
LA GRAN IMPORTANCIA DE LOS DRECHOS CIVILES Y POLITICOS.
La gran importancia de garantizar
constitucionalmente los derechos civiles y políticos de los individuos en
cualquier sociedad dada, radica en que estos derechos presuponen un ambiente de
paz, de protección, de tolerancia, de armonía, de no permitir la arbitrariedad
o la fuerza bruta, permiten la equidad y el utilizar la ley escrita como
elemento de solución de los conflictos, sin que haya distingos de personas ante
la ley o que la impunidad se convierta en la regla de oro de los gobernantes en
contra de los gobernados, permiten también que los individuos que ejercitan el
poder político puedan ser examinados y escrutados por el resto de la ciudadanía
en base a la ley.
La presencia de los derechos civiles y políticos
elimina la violencia, la inmunidad y la impunidad de las instituciones
gubernamentales contra las personas y obliga al poder a trabajar de forma
transparente en lo político, económico, cultural y social, evitando de esa
manera que pueda hostigarse, perseguirse, coaccionar,abusar e incluso eliminar
físicamente a aquellas personas que los gobernantes consideren como negativos
para su gestión de gobierno.
El hecho mismo de que existan
constitucionalmente los derechos civiles y políticos de las personas, nos habla
de una sociedad democrática, de un régimen político anti autoritario o
antitotalitario. Todos sabemos que bajo el sol, nada es perfecto. La DEMOCRACIA
tampoco lo es. La democracia tiene mucho camino por andar para perfeccionarse y
servir mucho mejor a los intereses de las personas y los pueblos, pero no hay
dudas de que los mecanismos democráticos son los únicos capaces de
perfeccionarse en sí mismos para lograr mejores sociedades.
.La imperfección democrática comparada con
los regímenes políticos que les niegan los derechos civiles y políticos a sus
ciudadanos, sería como comparar al Paraíso con el Infierno. Con todos los
defectos posibles y los conocidos, que tienen los sistemas democráticos
actuales,(unos más y otros menos) la calidad de vida de los habitantes de las
democracias es incomparablemente superior al de cualquier régimen
antidemocrático.
Por otro lado, la ausencia de derechos
civiles en los estados no democráticos, ha creado una violencia, un temor y una
inseguridad social entre la población que arruina por completo el andamiaje
social. A la violencia delincuencial, se le suma la violenceia política, la
violencia que genera la impunidad gubernamental. Así mismo, la falta de
transparencia de los gobiernos, la secretividad con que actúan y el sectarismo
intolerante que manifiestan, permiten que otras violencias como el narcotráfico
y otros tráficos y acuerdos nocivos amenacen y conculquen aún más, las
poquísimas posibilidades de libertad de los ciudadanos.
El secretismo, la falta de transparencia y el
control de las instituciones y medios de información de la sociedad, hacen
posible, que graves delitos internacionales como la prostitución infantil o,largos
períodos en prisión sin que se levanten cargos contra la persona imputada ni
pueda verse a un abogado, puedan existir tranquilamente sin que los ciudadanos
puedan siquiera emitir una queja.Para no hablar de las personas que pueden ser
encarceladas por varios años sin haber cometido delito alguno o que incluso
puedan ser eliminados físicamente en juicios sumarísimos de pocas horas de
duración, simplemente porque el grupo en el poder quiere dar un escarmiento.
Los derechos civiles y políticos constituyen
una conquista estratégica de los ciudadanos porque al no tenerlos los gobernantes
actúan como hace 500 años atrás nos decía Nicolás Maquiavelo debía actuar un
Príncipe que quisiera mantenerse en el poder de por vida.
Una de las cosas que más sorprende cuando uno
relee la obra El Príncipe que
escribiera Maquiavelo, es el constatar que ese príncipe es real, tangible,
actual, que vive y actúa bajo un ambiente con nuevos descubrimientos y
elementos cientícos y tecnológicos, pero sigue siendo el mismo que él
describiera y le recomendara qué hacer, para no perder su poder. Todo indica
que la naturaleza del poder, y sobre todo del poder no democrático no ha
cambiado ni cambiará jamás, por mucho que se esfuercen en desmentirlo aquellos
con vocación para destruir la vida de los demás. Según Maquiavelo el príncipe
es astuto y cruel, persigue y elimina a sus opositores a los que llama
enemigos.invade territorios, crea ejércitos y armas nuevas, trata por todos los
medios de ganarse al pueblo,ya sea por la persuasión, la división o la
violencia. Coloca a los hombres de su confianza en los puntos clave del estado,
elimina a sus rivales, crea purgas intestinas para deshacerse de
rivales,asesina, roba, ordena genocidios, deporta, confisca bienes y lo
destruye casi todo para construir su gran máquina de poder.
Según el creador de las Ciencias Políticas,el
príncipe sueña no sólo con imperar en su territorio, sino que aspira a
expandirlo a otros continentes y si le es posible, al resto del mundo.Aunque
parezca increíble Maquiavelo retrató para los tiempos, la naturaleza biológica
de esos hombres que aspiran a un poder de por vida sin importarle nada más. Los
ejemplos están ahí, a nuestra vista, incluso en nuestra cercanía, tienen
nombre, apellido y familia.
Si existieran derechos civiles y políticos en
los países donde esos regímenes antidemocráticos están presente. Nada de lo que
describe Maquiavelo con tanta actualidad, tendría lugar. Otros problemas existirían,
otras luchas, otras aspiraciones, La vida no deja de ponernos retos que debemos
vencer, pero no tendríamos que convivir con algo tan absurdo y demoledor y antihumano como nos enseñara Maquiavelo´
LA
MEJOR MANERA DE COMBATIR LA VOLENCIA Y LA ALIENACION SOCIAL
No hay dudas que la mejor manera de combatir
la violencia social, la inseguridad ciudadana y la alienación psicosomática que
producen los regímenes antidemocráticos es la lucha por los derechos civiles
unido a la lucha por solucionar las necesidades insatisfechas.
La sociología contemporánea nos deja saber
claramente que el ser humano va acumulando necesidades que crecen sin cesar.
Estas necesidades son completamente naturales por cuanto son inmanentes al
hombre como especie.En la misma medida que esas necesidades no son satisfechas
por falta de oportunidades sociales para lograrlas, esta situación genera violencia,
criminalidad, desajustes en la mente, la racionalidad y en la percepción de la
realidad y de las cosas.
Estas teorías sociológicas nos hablan
claramente que para lograr la paz social y por ende, la seguridad en las calles, más que represión y cuerpos
especializados de la policía y el ejército o de los servicios secretos del
estado, lo que hace falta es tener una población bien alimentada y con sus
necesidades más elementales cubiertas, además de poder soñar o imaginar que las
que pueden faltarle las va a poder lograr. En una sociedad nadie puede sentirse
o estar seguro sabiendo que alguien puede asaltarle, robarle, agredirle,
simplemente para poder comer o llenar algún pequeño vacio personal o familiar.
Nadie roba en las calles para hacerse rico o gran empresario.
Por tanto la sociedad debe garantizar las
necesidades básicas de las personas por cuanto ello constituye un bien público,
un gasto social fundamental para garantizar un ritmo armónico del cuerpo
social. Aunque muchas democracias aún no han resuelto este problema, en los
países antidemocráticos la situación es muchísimo peor debido a que los
habitantes pueden ser severamente reprimidos y castigados si organizaran
protestas contra el gobierno por la situación de pobreza, miseria y
limidtaciones alimentarias y de todo tipo que padecen.
Las futuras democracias en Latinoámerica y el
Caribe, junto a la garantía constitucional de las libertades civiles y políticas y el respeto a
todos los derechos humanos, deberán trabajar arduamente por una cultura
multicultural y en darle solución a las necesidades de la población que
incluyen tanto las necesidades fisiólogicas de las personas como las referidas
a la seguridad.
Quiere esto decir, que cuando las necesidades
fisiólógicas están cubiertas (agua sana, las comidas necesarias del dia,
vivienda adecuada para evitar lluvia, calor, frio, insectos,etc., la vestimenta
necesaria para relacionarse socialmente, los individuos comenzarán entonces a procurar
por su seguridad .
Después que la seguridad y las necesidades
fisiológicas están resueltas, las necesidades espirituales comienzan a
aparecer, esto incluye la autoestima, el cariño, el dar y recibir. Dentro de
estas necesidades apuntaba el sociólogo norteamericano Maslow, la necesidad de
autoestima se convierte en vital, por cuanto la autoestima incluye la estima y
el respeto hacia las demás personas en
pie de igualdad. Sin esta fuerza que brinda la autoestima o autoconfianza, las
personas se sentirían inferiores, acomplejadas, débil, incapaz, insegura como
persona, desvalorizada y por tanto alienada.
Cuando todas estas necesidades humanas han sido logradas por los individuos dentro de
un ambiente de libertades democráticas, las personas entonces acceden a lo que
Maslow llama las necesidades de
desarrollo personal que constituye la necesidad de ser y hacer aquellas
cosas que el individuo piensa que ha nacido para ellas y que constituyen su
completa realización como ser humano y como ser social. Este estadio de
necesidad humana es el más complejo y subliminal de todos, pero constituye uno
en el cual el individuo no está atado a ninguna necesidad material o
espiritual, sino a un deseo subjetivo y único de realización propia.
No hay duda alguna que ningún régimen
autoritario, semitotalitario, totalitario, sectáreo o fundamentalista (todos
antidemocráticos) podrán jamás proveerle a los individuos esta posibilidad de
realización humana. Por eso en todos aquellos países totalitarios que nos
anunciaron un nuevo tipo de persona, de ser humano superior,han fracasado
lastimosamente. No puede haber hombre nuevo cuando este hombre ha sido
desarrollado como un mero y simple servidor de la voluntad ajena proveniente de
las decisiones y caprichos de un muy reducido grupo de hombres que controla las
riendas de todos los poderes existentes en el país y construye una mentalidad
social subordinada, sin iniciativas ni
análisis propios.
Podemos afirmar que el conjunto de libertades
civiles, políticas y de derechos humanos, junto a un tenaz y constante esfuerzo
por resolver las necesidades de las personas dentro de un ambiente democrático,
multicultural y repleto de un discurso dignificador y estimulante al espíritu humano,
constituyen las recetas básicas para el futuro cercano de aquellas naciones que
aún padecen el estilo principesco de gobierno y regímenes políticos que
excluyen a los pueblos de las decisiones fundamentales de sus países y de sus
propias vidas.
Ivan Cesar Martinez .
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